viernes, 7 de septiembre de 2018


Teoremas poéticos*

Basarab Nicolescu




La idea de “teoremas poéticos” se me apareció repentinamente luego de un encuentro-choque, el 9 de febrero de 1991, con Michel Camus y Roberto Juarroz, en presencia de muchas personas que nos eran próximas. Asistía con sorpresa, en el fuego de las discusión, al nacimiento de ideas que no pertenecían a ninguno de nosotros- eran engendradas simplemente por nuestra interacción.
Daré un solo ejemplo. Había hablado ampliamente de la lógica del tercero incluido y de su relación probable con el imaginario poético. Pero fue Michel Camus quien inventó la expresión del “tercero secretamente incluido”, expresando así, en tres palabras, la esencia de todas mis palabras y además de muchos de mis escritos. Fue esta maravillosa expresión la que desencadenó en mí la necesidad imperiosa de formular los “teoremas poéticos”, escondidos en mis libros y en mi pensamiento.
La expresión “teoremas poéticos” no debe absolutamente ser considerado como la traducción de la irrisoria vanidad de querer crear un nuevo género literario o filosófico. Al contrario, ella debe ser tomada como una confesión de humildad: no surge ni de teoremas, ni de poemas y mucho menos de aforismos o de pensamientos filosóficos. Los “teoremas poéticos” son el lugar de reencuentro entre la Física Cuántica, la Filosofía de la Naturaleza  y la experiencia interior.
Me he interrogado largamente porque esta forma tan particular de escribir se me impuso a mí de una manera tan inesperada, sin poder conseguir una respuesta satisfactoria. Creo por tanto que el sentimiento de urgencia ante la tarea inmensa de una formulación transdisciplinaria de una nueva Filosofía de la Naturaleza ha jugado ciertamente un rol en el surgimiento de los teoremas poéticos. Las ideas expresadas en el presente libro en algunas decenas de páginas demandaría unas quincenas de volúmenes si se expusieran según el discurso habitual- científico y universitario. Trabajo que me será imposible llenar en el tiempo que me queda por vivir y que está además consagrado a la investigación en la física cuántica.
Surge también en un fin de siglo. Mi primer libro, aparecido hace un cuarto de siglo en Rumanía, fue consagrado a un gran matemático y gran poeta rumano. Descubrí recientemente que la expresión “teoremas liricos”, prefiguración de “teoremas poéticos”, estaba presente en este libro. Era natural encontrar de nuevo, sobre este camino, la poesía y los poetas.
Bien entendido, los teoremas poéticos se presentaron en mí en un total desorden. He debido entonces hacer una selección para proponer al lector un camino al interior de este libro: concebir el texto entero como si fuese él mismo un teorema poético. En otras palabras, este texto aparece como un “teorema de teoremas”. Pero muchas otras cosas son posibles. El lector puede adoptar su propio criterio y emprender otro viaje, siempre diferente. Porque una característica sorprendente de los teoremas poéticos es que su interacción cambia en función de su proximidad.
Un libro de tal naturaleza no puede incluir una bibliografía. Pero el lector avisado podrá fácilmente reconocer el diálogo instaurado con otros pensadores.
Quisiera agradecer a la revista  "Phréatique" que recogió mis primeros teoremas poéticos. Agradezco particularmente a Gérard Murail, Maurice Couquiaud e Ilke Angela Maréchal quienes supieron transformar esta revista en un lugar cimero transdisciplinario de encuentro entre la ciencia y la poesía. 
Quisiera, en fin, expresar mi vivo reconocimiento a Pierre Oster por una lectdura muy atenta del manuscrito.


Paris, junio 1994

Prólogo al libro THEOREMES POETIQUES EDITIONS DU ROCHER, 1994. Versión al español: Celso Medina




No hay comentarios: